Frente litoral de las Palmas de Gran Canarias: ANÁLISIS Y DIAGNÓSTICO

ANÁLISIS

El desarrollo urbanístico histórico de Las Palmas de Gran Canaria se ha asentado en la carretera que une el puerto con el sur de la Isla. La abrupta topografía también ha contribuido a la implantación concentrada de infraestructuras en el litoral.

Las entradas a la ciudad desde El Rincón y Jinámar presentan un aspecto degradado en el que se mezclan de manera indefinida reductos agrícolas sin explotación, industria de tejido desestructurado, edificaciones comerciales de baja calidad y núcleos poblacionales desfavorecidos por este desorden inconexo. A esto debemos añadir la presencia de la autovía, que a pesar de su funcionalidad en términos infraestructurales, forma una barrera entre el mar y los habitantes que contamina el ecosistema litoral acústica y visualmente.

Sin embargo, en estas aproximaciones Norte y Sur atravesamos enclaves naturales de enorme potencial recreativo, cultural y turístico. El paisaje de la ciudad destaca recortado tras la abrupta geología de estos enclaves y la Isleta sirve como fondo de referencia que contrasta con la línea del horizonte.




DIAGNÓSTICO

El análisis revela una falta de conectividad longitudinal del borde litoral consecuencia del deterioro urbano y ambiental que supone la autovía. Entre los principales polos de actividad se interponen espacios libres deteriorados por la presencia de infraestructuras.

En el sentido transversal encontramos los barrancos. Tradicionalmente han sido los enclaves de asentamiento poblacional, y tal y como representa el análisis suponen espacios de oportunidad de continuidad de espacios libres urbanos hacia el interior de la isla.

Actualmente, la inminente finalización del anillo de circunvalación ofrece una gran oportunidad en la transformación de la ciudad. Desde el punto de vista de la gestión esta nueva infraestructura permite realizar intervenciones en el litoral sin perturbar en exceso el funcionamiento urbano de Las Palmas, y a su vez, estas intervenciones devolverán el paseo marítimo desde el que vivir y admirar la ciudad.